CAMPO DE GIRASOLES
Caminemos por este paraje y descubriremos que la naturaleza nos enseña y ayuda a ratificar el porqué nos podemos amar sin limitaciones o tabúes, sin censuras ni restricciones de ningún tipo.
Observemos como el polen cae sin permiso sobre el estigma e inicia la polinización, muchas aves buscan su pareja solo en el tiempo preciso y otros animales se aparean sin tener un compromiso, porqué nosotros los humanos necesitamos entonces tener propiedad sobre otros, si cuando nacimos lo hicimos solos y con la libertad de continuar o de partir. Porqué la necesidad de poseer de sentirse dueño de otro, de saber que hace, que piensa; porqué este querer aferrarse a alguien buscando un complemento.
Si miramos un campo de girasoles veremos que cada flor da su mayor esplendor al día, busca los rayos del sol para que el los nutra y juntos brindan a la naturaleza ese amarillo resplandeciente sin esperar retribuciones. Después se prepara para perpetuarse en las simientes que en sus entrañas gesta.
Así quiero ser yo, un solo girasol, brindarte a ti mi sol, mi cara un día y luego feliz de haberlo hecho poder entregarme a las entrañas de la tierra y así perpetuar este amor, no esperar compromisos, ni compensaciones. Solo amar y si poder proyectar felicidad.
Pero desdichadamente soy demasiado humano, no puedo dejar de lado esta necesidad de saberme igualmente amado, de ser correspondido, eso me atormenta.
Yo quiero solo quiero ser un GIRASOL!!!